Montaner: la izquierda radical vende paranoia en la región
Fuente: Elsalvador.com
Las denuncias de supuestos intentos de golpe de Estado y magnicidios en los países de la Alternativa Bolivariana para las Américas (Alba) y sus aliados son parte de una “paranoia estratégicamente manejada” para radicalizar a las izquierdas y encubrir problemas internos como la corrupción y la incapacidad para gobernar.
Esa es la conclusión a la que llega el escritor y periodista de origen cubano Carlos Alberto Montaner al ser entrevistado anoche por El Diario de Hoy, tras su llegada a El Salvador.
Montaner, quien es columnista de El Diario de Hoy desde hace décadas, analizó la situación coyuntural en América Latina y especialmente la ola de denuncias de supuestos golpes de Estado en varios países con regímenes de izquierda.
La constante en la mayoría de los casos, a su juicio, han sido las denuncias de supuestos golpes, intentos de magnicidio y amenazas a la libertad de expresión. Para él, todo esto tiene una razón que debe ser advertida por todos.
“Lo que están intentando es convertirse en víctimas de un peligro que no es real para que no haya garantías para toda la sociedad, como ha ocurrido en Venezuela y Ecuador y utilizar ese supuesto peligro para que no se hable de nada que tenga que ver con el mal gobierno del que son culpables”, enfatizó.
El intelectual, que pronunciará hoy una conferencia en San Salvador bajo los auspicios de la Cámara de Comercio e Industria, consideró que la función de los grupos responsables de la sociedad democrática debe ser aclararle a los pueblos que promover el miedo de golpe de Estado o magnicidio es la práctica de los grupos más radicales para radicalizar a sus militantes y acabar con las libertades fundamentales y las garantías civiles, entre ellas la libertad de expresión.
“Es una paranoia estratégicamente organizada –ni siquiera es legítima– con el propósito de recortar las libertades”, enfatizó sin asomo de duda.
En seguida, cita el caso de Ecuador, que a su juicio es el ejemplo clásico de mal manejo de una crisis por un presidente “arrogante” que comete la temeridad de enfrentarse a un grupo de policías y que posteriormente se ha tratado de hacer ver como un golpe de Estado. “La imprudencia de un grupo de policías no puede contrarrestarse con la imprudencia de un jefe de Estado”, razonó.
A estos gobernantes se les olvida que fueron elegidos para resolver problemas, no para complicarlos, agregó.
“Si un gobernante dice que se vive en estado de conmoción social y de riesgo, esto le permite dictar medidas de control político para sacar a sus adversarios del campo de la libertad de expresión, para aprisionar a sus oponentes, para acusarlos de actos delictivos contra el Estado y esto se va volviendo “normal”.
La primera baja de estas medidas dictatoriales, explica el escritor, es la libertad de expresión, como se ha visto en varios países que no quieren que los periodistas denuncien los desmanes de los gobiernos.
En este sentido, advirtió que se debe tener cuidado con las legislaciones que se establecen en materia de libertad de expresión, porque “una vez que se permiten se comienza a construir la jaula de los periodistas y de los ciudadanos. Hay que movilizar a la opinión pública para evitar que se cercenen estas libertades. Si no hay libertad de expresión, el resto de las libertades fundamentales está perdido”.
Montaner critica la intolerancia de la izquierda a la crítica. “Uno encuentra en la prensa conservadora espacios para la izquierda, pero en la prensa marxista nunca hay espacios para quienes piensan diferente. Reclaman de sus adversarios lo que ellos no son capaces de dar”, dice.
SOCIALISMO SE RESQUEBRAJA
Montaner no duda en decir que el socialismo del Siglo XXI “es un disparate condenado a desaparecer”. Sin embargo, este proceso será doloroso y lleno de descalabros, sobre todo a partir del resquebrajamiento del régimen cubano. Y lo explica así: “Ellos han construido una cadena que es tan débil como cada uno de sus eslabones, especialmente con sus eslabones clave como son Venezuela y Cuba, que es la que pone la inteligencia militar y policial, la construcción de la jaula, lo que aprendieron de la ex Unión Soviética de cómo se construye un Estado totalitario, pero en el momento en que desaparezca la Venezuela de Hugo Chávez y la dictadura de Cuba evolucione en otra dirección, el experimento del socialismo del Siglo XXI se viene abajo porque no tiene sentido”.
Presagia que para entonces tal vez quede la “semi-dictadura étnica en Bolivia” y no tendrán futuro ni Daniel Ortega en Nicaragua ni Rafael Correa en Ecuador.
Para el escritor residente en España, es importante que los partidos de izquierda que acompañan a estos regímenes reflexionen en estas realidades para no ser arrastrados. “Tienen que abandonarlos, si quieren sobrevivir”, expresó tajantemente y en seguida les recuerda lo que les pasó a los partidos comunistas del bloque soviético, que desaparecieron o se convirtieron en socialdemócratas o incluso algunos se hicieron de derecha, “pero se apartaron del error”.
En este sentido, celebró el intercambio de cartas abiertas que sostuvo en la internet con el cantautor cubano Silvio Rodríguez sobre el sistema comunista castrista.
“Lo mejor fue el intercambio, porque lo leyó toda la clase intelectual cubana, porque son los pocos que tienen acceso a internet y otros porque se pasaron la información. Y ese debate sirvió para aclarar muchas cosas que no se podía examinar con libertad. Silvio decidió ponerle fin al debate, pero las tres cartas le hicieron un buen servicio a todos. Ganamos todos”, enfatizó.
A CUIDAR LAS LIBERTADES
Al hablar sobre El Salvador, aclarando que no puede profundizar en lo interno, Montaner confiesa que se siente bien porque conoce el país, lo ha visitado muchas veces y “aquí se han preservado las libertades, no hay presos políticos y el sistema de economía libre funciona”.
A su juicio, los salvadoreños deben evitar que el país cambie el rumbo democrático y no deben dejarse engañar “por los cantos de sirena” del chavismo y del colectivismo, “porque eso sería traer el hambre y la crisis a este país”.
Montaner lo dice más directamente: “los salvadoreños no pueden correr riesgos ni andar experimentando, porque los países y las sociedades no son campos de experimentación”.
En realidad, la intención de discutir la entrada del blog es increíblemente realista . Yo la opción de escuchar algo totalmente nuevo con esto a causa de que realmente proporciona el mismo sitio dentro de mi Estados Unidos en esta materia por lo que esta ayuda específica ? Un montón a todos s . Tuve la oportunidad de una buena mirada sobre el tema , más cuenta de un gran un número de blogs , pero a diferencia de eso. Gracias por revelar tanto dentro de su sitio web.